Bienvenido al Nº 6

Sí, sí, señores, hemos llegado al Nº 6. Ya con media docena de Observadores en la mochila, repartiremos esta semana el Nº 7. Ustedes, mientras tanto, pueden visitar la presente edición, que corresponde a Agosto.
Salud y buena vida.

Contratapa


Merendando en un bar*

Por Enrique Medina

Domínguez recorre Corrientes en busca de un bar. Se ubica en una mesa del medio.

Es irrespetuosamente joven. Apretando la culata del revolver escondido en el bolsillo derecho de la campera, el muchacho entra al bar. Arrinconada, con toda la vidriera, la mesa que les pertenece está libre. Con desgano saluda al mozo y va al baño. Orina. Se mira en el espejo. Se ve tan vencido que no tiene ánimo para acomodar el mechón que le cae sobre la frente. Infinitamente veloz, se le cruza la imagen de ella realizando el acto. Cierra los ojos para defenderse; pero ella lo mismo le sonríe, levanta la mano, le acaricia la frente y le acomoda el cabello rebelde. Abre los ojos. Se ve tan viejo, tan inútil, tan poca cosa, que se desconoce. Apretando la culata del revólver va a la mesa. Se sienta del lado del rincón para dejarle a ella el último sol de la tarde. El mozo le trae el café y le habla de fútbol; pero, ante la indiferencia del muchacho, absorto en la gente que camina en la calle, se va.
Ella acaba de doblar la esquina de la vereda de enfrente. Se detiene para responderle a una mujer que le ha preguntado algo. Enseguida cruza mirando hacia ambos lados; este movimiento y algo de brisa cómplice le mueve el pelo, suelto hasta la cintura. Todos la miran. Hasta el mozo y el barman, para quienes ya no es novedad pero sí repetida alegría cada vez que ingresa en el bar. Ella sonríe y agradece, como sabiendo que por delante tiene una vida ancha y larga, indulgente, tentadora. Simpática, formal, le da un beso en la mejilla. El sol se está yendo y el fresco aumenta, pero igual, ya sentada, se quita el tapado dejándolo caer sobre el respaldo de la silla. Siempre que realiza este gesto, él escucha rumores en el pecho, rumores cálidos que le recorren el cuerpo con regocijo. Rumores que ya no son compartidos. Lo dos lo saben. Todo ya está hablado y él aprieta la culata del revólver para que el rumor, que no deja de caminarle el cuerpo, se detenga. El mozo deposita el té para ella y, presionado por el frío que percibe en la mesa, o porque le gusta hablar, o porque es curioso, o porque se cree en la necesidad de intimar con los clientes, intenta el diálogo, pero en la mesa el frío aumenta, por lo tanto se va. Consciente del momento, ella se concentra en revolver el té, echar unas gotas de limón y beber unos sorbitos. Apoya la taza en el plato, mira al muchacho y habla. Habla. Habla con respeto, con calma, queriéndose hacer comprender, tratando de no herir pero sí ser concreta. Esto es lo que él supone mientras aprieta la culata del revólver; supone, porque no la escucha. Aprieta la culata y la suelta y vuelve a apretarla y suelta y acaricia el caño helado y hasta con el índice llega al agujero por donde saldrá la bala que pondrá las cosas en orden. Orden que se rompió sin que él lograra hacerse cargo. Y él jamás podría haberse hecho cargo porque cuando se acaricia una piel como la de ella, un pelo como ese, y se besan esos labios convencido de que ni dios ni el mundo existen, uno no puede hacerse cargo de nada, ni de algo que se esfuma, se escapa o se pierde. Quizás esa sea la incógnita más grande de la existencia: no darse cuenta de que la película ya terminó y que uno debe salir del cine porque hay otro que quiere y tiene derecho a entrar a verla. Y ella es una película muy especial. Ella concedió esta última cita por la insistencia de él pensado que a lo mejor es necesaria para que acepte, comprenda la realidad de una buena vez y la deje en paz para hacer su vida. Él quisiera entender pero no oye nada. Se afirma apretando la culata, sin saber (porque jamás leyó un libro y apenas fue hasta segundo grado) que repite la despedida de Kerouac cuando la negra le dice que ya todo terminó y que si él lo desea ella puede verlo de tanto en tanto pero sin ilusiones. Con tanta fuerza aprieta la culata que, si pudiera verse a través de la ropa, descubriría que la piel de su puño está a punto de estallar. En vez de esto, mira a un anciano entrando al bar, lo observa fumando, tomando café, mirando la gente pasar. Ella termina de hablar, se ve que no tiene más que decir. Él comprende que vive el instante en el que debe sacar el arma. Ella murmura algo, ya de pie se pone el tapado, se inclina para darle el último beso en la mejilla y para no perder el equilibrio, le apoya la mano en el hombro. Cuando ella comienza a girar para irse, él siente que le aprieta el hombro. Ahora escucha los ruidos del bar. Ahora, que ella se está yendo sin sol, que cruza la puerta y ya no la ve. Ahora, deja de apretar la culata del revólver y se cubre la cara con las manos. Llora porque se cree un cobarde. Pero dentro de algunos años, segundos antes de morir tras asaltar una gasolinera, recordará que en este momento, del que soy feliz testigo (piensa Domínguez), le sucedieron dos cosas que fueron esenciales en su vida: una, que al no sacar el revólver se recibió de hombre; dos, que tuvo la suerte de sufrir por amor.

* Del libro El escritor, el amor y la muerte

Directo al corazón


Con mi hermana, no… *

Por Alejandra Tenaglia


Así como no es posible elegir a quién amar, tampoco es posible encontrar dos historias exactas. No obstante son numerosos los casos en los que, con un/a amigo/a de hermano/a se convierte en literal la metafórica frase: “es parte de la familia”.
Año 1996. Rosario es el destino casi obligado de aquellos chabasenses que desean continuar sus estudios una vez terminado el secundario. Mucho más si allí se tienen familiares. La protagonista de esta historia, cuyo anhelo era, al igual que uno de sus hermanos, convertirse en odontóloga, partió desde su pueblo hacia esa ciudad, con todos los cambios que ello implica, sobre todo en lo relativo a la cantidad: más gente, más lugares, más variedad. No obstante el travieso Cupido sabe rebuscárselas para lograr que del más nutrido escenario, sólo una persona destaque acaparando nuestra mirada.
Asistido entonces por el niño que siempre lleva consigo arco y flecha, un caballero de voz clara e inteligencia explícita, usual visita en el departamento en el que ella vivía junto a sus hermanos mayores, cautivó su atención. Todo ideal es imposible, ha de haber pensado ella; pues conocida es la prohibición de tocar a los amigos de los hermanos y más conocida aún es la máxima: con mi hermana, no. Se dedicó entonces a su carrera, a conocer gente, a descubrir espacios, a vivir todo lo nuevo que emergía en sus días, en los que él estaba inmerso de un modo indefinido. Se acercaban y alejaban en ese juego fantástico que se despliega en la etapa de seducción, con la incertidumbre en ristre por el verdadero tenor de la relación que el trato cotidiano iba forjando. Cuatro años pasaron, junto a otros afectos que ambos supieron procurarse, hasta que él decidió el primer beso sin preámbulos, planteos y quizás, tampoco planes. Sucedió, en ese instante que ocurre con la misma naturalidad y la sorpresa de  un amanecer cualquiera, a la vera de un boliche, con la complicidad de la noche. Lo que sucedió después, durante seis meses, fue en secreto. Hasta que la incomodidad que produce el ocultamiento se hizo insoportable para ella y, aprovechando la presencia de Baco que enturbia el entendimiento, les contó la verdad a sus hermanos. Como era previsible, aquel que había sido nexo involuntario de nuestros enamorados, reaccionó en forma adversa. También el protagonista de esta historia se enojó, e incluso se ausentó por un tiempo. Y aunque luego retomaron el contacto, la relación aun no estaba madura para lograr la estabilidad que permite caminar de la mano sin sobresaltos. Cuando ella terminó su carrera, decidió también terminar con ese vínculo extraño que parecía no conducir a ningún lado. Por su parte, él había decidido un viaje al extranjero en busca de una oportunidad laboral. Tres años en Italia le permitieron probarse a sí mismo, conseguir un buen trabajo, asentarse, no sin dejar de extrañar. Ella por entonces pasó por el difícil trance de perder a su padre, volvió a su pueblo natal y ya como profesional, comenzó a trabajar. Sólo una vez se escucharon la voz en esos más de mil días, a través de un teléfono, y por casualidad. Hasta que él consiguió un pasaje de promoción y, coincidiendo con el cumpleaños de su padre, decidió viajar a Argentina por unos días. En una salida de amigos por bares rosarinos, se volvieron a acercar. El vuelo hacia Italia partió sin él, que así lo decidió en soledad. Ella se enteró después. No había intentado retenerlo; así de generoso, amplio y respetuoso es el verdadero amor. Los fines de semana se encontraban, ora en la casa donde él vivía con su padre en la ciudad, ora en la casa en la que ella vivía con su madre. La necesidad de un lugar propio, privado y compartido los llevó a alquilar en el pueblo y organizarse para que sus proyectos personales también puedan seguir adelante. El bienestar que supieron darse, se resumió en el hijo que han traído al mundo. Un mundo al que enfrentan directa u oblicuamente como a todas las decisiones que han ido tomando, ratificadas con hechos y revestidas con el encanto de estar enamorados.
Quizás no sea entonces equívoco afirmar que, a pesar de que el amor suele anular la razón, es la unívoca razón de esta unión que de algún modo comenzó, hace ya 14 años.


* Basado en una historia real cuyos protagonistas han pedido la reserva de sus nombres.
    

La historia: una sucesión de recuerdos



Por Carina Sicardi  


Las imágenes asociadas a los recuerdos suelen tener un tinte especial, en donde se mezclan la nitidez de lo acontecido con lo que el tiempo les va agregando. Y aquello que cambia los colores, tiene que ver con las emociones asociadas a ellos.
Incluso es probable que ciertos acontecimientos puedan ser relatados por personas que los compartieron, de maneras tan disímiles que pareciera que alguno de los dos “ha perdido la cordura”. Los famosos reencuentros con ex compañeros escolares, cualquiera haya sido el nivel, es prueba fehaciente de lo antedicho.
Así es que, una historia muchas veces repetida a quien circunstancialmente ha prestado la oreja, pasa a ser casi desconocida de boca de otro protagonista. Aquí comienzan a surgir un abanico de opciones y dudas. ¿Le digo que no ocurrieron las cosas de ese modo?, lo que sería una sutileza o una forma de responder cuando no es tan importante la falta de coincidencia (o cuando no nos implica directamente a nosotros, perjudicándonos). ¿Lo dejo seguir con el disparatado relato sosteniendo una fingida sonrisa, creyéndonos dueños de la verdad?, pensando que ya tendremos oportunidad de encontrarnos a solas con alguien que nos sirva de corroborador.
Las opciones son muchas, pero el conflicto surge cuando logramos corrernos del trono en que nos sentamos cómodos, avalados por la soberbia, y surge la duda: ¿y si el equivocado no es el otro? Porque incluso hasta último momento es más fácil plantearlo así que pensar directamente en el error propio.
Vivir desde la certeza es lograr la tranquilidad de andar por el camino correcto, para nosotros, por supuesto, pero también es habituarnos al hecho de que el tiempo que nos lleva sostener armada nuestra burbuja, nos aleja de los otros y nos consume la vida.
Tratamos de estar en equilibrio sin entender que es una utopía y que quizás la vida sea justamente la búsqueda, por lo que tendríamos que empezar por aceptarnos como desequilibrados, sin miedo a esta palabra, que muchas  veces es tomada como sinónimo de locura.
Es tanto el temor que tenemos de estar locos, que hasta la falta de coincidencia en los recuerdos nos angustia: ¿estaré loca o tendré Alzheimer? Ante cualquier duda consulte al psicólogo…
Personajes raros si los hay: tan resistidos como amados, el loco o el sabio, lo oculto o el orgullo de decir “me estoy analizando”, el miedo de encontrarnos con lo que no estamos seguros si queremos…
Porque todo sujeto sabe sobre su historia, aun detrás de todos estos recuerdos encubiertos, aun sobre las resistencias impuestas por nosotros mismos para no llegar, eligiendo muchas veces el camino más  largo, el sintomático.
La naranja, claro está, es un elemento en sí mismo; pero por tener forma esférica puede esconder un lado amargo, o, por qué no decirlo, podrido. Presentada de una determinada manera, aparece como la solución ante un día caluroso, o un agradable digestivo después de un excesivo banquete. Pero quizás, si calmamos nuestras ansiedades y nos damos el tiempo para, simplemente girarla, podríamos descubrir ese otro lado no tan apetitoso. Esto no hace que la fruta pierda absoluta e indeclinablemente todo su encanto, simplemente será un obstáculo, un pequeño desencanto a resolver. Sigue siendo, sin embargo, una naranja.
Como los recuerdos compartidos, dolorosos o lindos, tremendos o reconfortantes, pasionales o infernales, cálidos o gélidos, describen una realidad, habrá que pensar si nos quedamos mirando el lado podrido o nos seguimos deslumbrando por el hermoso color naranja.
  
  

Baldosa floja


Intolerantes

Por Alejandra Tenaglia

Don Carlos ya ha pasado los setenta años. Con saco de lana y gorro haciendo juego, pasea por allí por donde el sol logra filtrarse entre los árboles de la plaza apaciguando un poco la fría tarde. Me sumé a su paseo, y hablamos de lo que a él le molesta.

Uy nena, si te digo lo que a mí me molesta es posible que… me entendés… Que  terminemos en una zanja… ¡Y no cazando ranas eh!
Y porque… Me tienen podrido los fanáticos, eso es. No los puedo ni ver ni escuchar. Arruinan todo con sus… Mirá los “barrabravas”… Drogadictos – vagos – malandras – buenosparanada, protegidos de… Bueno, eso… Manguean, patotean… Mandan nena… mandan… ¿Me entendés lo que te digo? Cómo puede ser… Amenazan, matan… Un desastre, una… En fin…
También me molestan, me indignan, me… Los que van a hacer cola afuera del Banco o del médico como una hora antes de que empiece a atender… Vos decime, si saben que las puertas se abren a las 7 o a las 9 de la mañana, ¡¿para qué van tanto antes?! ¡Por joder nomás!... Tiempo, lo que se dice tiempo, no… El tiempo que se ahorran adentro, lo perdieron afuera a pleno rayo del sol, bajo la llovizna o muriéndose de frío… Y encima… Y sí, te obligan a hacer lo mismo… Si no, cuando llegás… Ni para el otro día te toca…
El argentino el argentino… Hace esas cosas porque siempre se cree el más… Lo único que quiere un argentino es poder demostrarle al otro: Tomá, soy más vivo que vos...
Y los activistas… Sí. Esos me tienen… Dale que dale tratando de convencer a la gente para que piense así o asá, como si uno solo no supiera… ¿O no?... Como si… Cada uno tiene su manera de pensar… Qué es eso de andar queriendo que todos… Algunos defienden cualquier cosa… Porque no me vas a decir… Se pasan, sí, se pasan de la… Hoy hay desde defensores del nado libre y con piruetas del salmón rosado hasta partidarios de los derechos del perro a bostezar en plena calle, porque así les mejora el pelaje… No jodan che… Todo tiene su… ¿eh? Yo sé que estoy viejo pero… Mirá, siempre fue así. En todos los tiempos hubo gente que… Ojo, yo respeto que algunos traten al gato como si fuera una persona, o mejor todavía que a las personas… Cada cual elige cómo o con quién pasar sus… Pero de ahí a que estén jodiendo a todos para que… No, eso ya no. Uno ve todo… Uno aprende mirando… Y bueno… No hace falta que venga otro dale que dale con la parla para engatusarte como si… Uno por algo ya tiene canas che…
Encima hay grupitos así… pufff… ¡en todos lados! A veces, te digo… Qué se yo, me hacen reír… Cosas que uno piensa que no le importan a nadie. Es raro… Qué bicho raro es el humano eh… Hay hasta defensores de la manzana verde que te acusan por cortarla con… Por no comerla como lo hizo Eva… Bueno, mirá dónde vine a parar, ahí empezó todo… No nena… Yo no dije eso… Menos delante tuyo, qué te pensás… Soy viejo, no… Pero si la mujer es lo más lindo que…  Todas eh, todas todas tienen algo… Eso tiene de bueno este ispa… Todas lindas. Todas. Pero ahí tenés, ves… Las feministas… Que la mujer vote, trabaje y tuti cuanti, todo bien. Ahora, decime… Decime la verduzca verduzca de lo que vos ves… La mayoría de las que están metidas ahí… No sé si es por conseguir que la mujer… Es más por… Nos odian… Nos odian a todos los hombres por algún atorrante que… que los hay eh… Pero tampoco para… Mirá, si la mujer se defendiera de la mujer y no tanto del… Les iría mejor. Se hacen peor entre ustedes que… ¿o no?
¿Qué pienso del matrimonio gay?… Son grandes, que hagan lo que… Si decís algo en contra lo primero que te dicen es intolerante…
Y decime, pero pensá bien eh… si dos no están de acuerdo, por lo que sea… ¿quién decide cuál de los dos es el que no tolera las ideas o lo que sea del otro?... Ah… te agarré ahí eh…


Fragmentos


¿En qué hondonada esconderé mi alma
para que no vea tu ausencia
que como un sol terrible, sin ocaso,
brilla definitiva y despiadada?

De: “Ausencia”, del escritor argentino Jorge Luis Borges, nacido el 24 de agosto de 1899 en Buenos Aires y fallecido el 14 de junio de 1986 en Ginebra, Suiza.





Demoliendo mitos


¿Sólo usamos el 10% del cerebro?

Suele decirse que la capacidad del cerebro es muy grande, y que es imposible llegar a utilizarla completamente. Parece ser que no es así. Diversos estudios han demostrado que no existe ninguna región del cerebro que permanezca inactiva, aunque sí es cierto que no usamos todas esas regiones simultáneamente. El hecho de que el daño en una pequeña porción del cerebro, acarree efectos terribles, demuestra que todo él está en actividad y es necesario. Así que, ya no hay excusas, somos lo que somos, al 100%. 


Paisajismo


Desde el jardín…  Zen

Por Verónica Ojeda de Razzini / Técnica en Paisajismo Urbana y Rural

Más allá de lo que implica como paisajista un trabajo de diseño en donde la técnica y los conocimientos son necesarios, muchas veces he tratado de incentivar sobre todo a los amantes de las plantas y el paisaje, a crear, a soltar la imaginación, a trabajar desde la emoción y la intuición. Y un poco de esa exigencia nació esta nota y algunas que vendrán.
Recorriendo las calles de Chabás encontré un jardín interior de reminiscencia zen: piedra, arena, agua y sólo un elemento vegetal de expresión pura.
Este espacio fue creado por la dueña de casa y aporta un fondo más que interesante y estético al local comercial que lo contiene, esa era la intención y desde mi punto de vista está más que lograda. Pocos elementos, una participación de color y mucha contundencia. Felicitaciones, sólo hay que atreverse, lo importante es que se sientan libres de experimentar sin temor. De eso se trata.

Agradecimiento: Josefina Basciano y su “Naranjo en Flor”

¿De qué se trata la Inseguridad?


Julio fue un duro mes para esta población, que sufrió hechos de inseguridad en viviendas urbanas y rurales, así como un terrible accidente en la ruta 33 cerca del cruce con la 178, que terminó con la vida de una familia. Todo ello generó conmoción y, de algún modo, son hechos que se interconectan en cuanto al cuidado que deben procurarnos las autoridades y a los problemas de fondo que padecen las sociedades modernas.


Lamentables sucesos en Chabás

Por Alejandra Tenaglia

Promesas de autovías que no se concretan, vidas que se pierden en las rutas engrosando la enorme lista fatal que se podría evitar o al menos disminuir, si las cosas se hicieran como debieran, más los hechos delictivos que se multiplican en los pueblos tomando en muchos casos el modus operandi de las grandes ciudades, son parte de una misma realidad de la que hoy día Chabás es partícipe.
Qué más debe suceder en la ruta 33 para que se decida finalmente hacer las obras necesarias, es una pregunta que cae de la boca de cualquier vecino sin encontrar nunca la respuesta adecuada que además, se concrete en hechos. La indignación es entonces un sentimiento inevitable, pero más profundo aún es el dolor de los familiares que ven escaparse la vida de los suyos sin que nada, nunca, cambie. Sólo el contador de muertos aumenta. Las empresas de peaje no cumplen con su parte y las decisiones políticas avanzan y retroceden al son de razones que nada tienen que ver con las necesidades diarias de la enorme cantidad de usuarios que transitan por las obsoletas rutas argentinas. El difícil trance que atraviesa la familia Méndez – Godoy desde el miércoles 14 de julio, fecha en que se produjo un trágico accidente en el que cinco personas de Chabás más una de Rosario, fallecieron, es descollante por la magnitud y sin lugar a dudas rubricante indeleblemente en la vida de sus allegados; pero no se diferencia en aquello que caracteriza a la mayoría de estos sucesos: son choques de frente, en una ruta por demás transitada, que hace tiempo debería ser autovía. No obstante los pedidos de los representantes de las localidades atravesadas por la 33, la obra no se concreta. Por ello, la pregunta se repite incansablemente: ¿qué más debe suceder para que se destrabe la ejecución de la misma?
Por otro lado, se escucha de la presencia de “motochorros” en localidades vecinas,  bandas que operan en ámbitos rurales, ladrones de bicicletas que ya nadie deja afuera de su casa con la tranquilidad de antes, tentativas y ya no sólo hurtos sino también robos a mano armada en el radio urbano. A ello se sumó el accionar de la policía que, en la madrugada del 9 de julio y en ocasión de la búsqueda de delincuentes, terminó baleando a un auto en circunstancias que aún se investigan, pero que dieron por resultado una menor de 15 años, totalmente inocente, baleada en un pulmón. Muchas más fueron las balas que se dispararon. Esto llevó a que el pueblo lleve a cabo marchas por la seguridad y la justicia.
Ambos casos, el fatal accidente y el recientemente descrito tuvieron repercusión en los medios no sólo de la localidad, y llevaron a que la Comisión Comunal de Chabás decretara al 15 de julio como día de Duelo.
¿Cuáles son las causas de la inseguridad en la que vivimos? ¿Cuáles las soluciones? Para indagar en la búsqueda de responsabilidades y pensar el problema con profundidad, les brindamos a continuación el enfoque de Ana Clara Deluca, estudiante de Antropología Social.



Ladrones sueltos

Por Ana Clara Deluca*

¿Qué habrá detrás de sobredimensionar el aspecto más superficial del problema de la Inseguridad? Ingenuidad probablemente no. Si el gobierno niega el problema bajo un discurso surrealista y desvariado, si la prensa oficialista de “678” organiza el club de la buena onda, y si mientras tanto,  la otra derecha en la oposición lo magnifica  para golpear a un  gobierno que en la repartija le dejó las migajas del banquete de la corrupción  y los favores, ¿seremos capaces de reflexionar nosotros mismos sin que “nos” piensen el problema de la inseguridad?

Apariencia y esencia del problema
Los buenos y los malos están en sus puestos. El teorema del ladrón y policía aparenta ser simple. El sentido común parece ubicar bien en sus veredas enfrentadas a víctimas y verdugos. Superficialmente, aparentemente, parece que lo único que falta resolver  del problema de la inseguridad es, en definitiva, repartir penas a discreción.
Pero la apariencia de un problema no es lo mismo que su esencia, y después del umbral de la primera viene la segunda. El  primer paso no es responder las preguntas sino hacer las preguntas correctas. Por eso, para saber cómo resolver el problema de la inseguridad, que en general es lo único que se debate, lo primero que debemos preguntarnos es “de dónde” proviene este problema.

Preguntas
Lo cierto es que las balas se multiplican por cada millón de nuevos pobres. Porque la pobreza trafica hambre, desigualdad y desesperanza; y el hambre, la desigualad y la desesperanza, son parteras de la violencia. ¿Cómo pretender que de la indignidad, la exclusión y la desolación surjan vínculos de amor? ¿Cómo pretendemos que sea la reacción de una persona cuya capacidad de serlo verdaderamente le es negada por no poseer determinados lujos, frivolidades y pertenencias materiales que perversamente este sistema propone a todos pero niega a la mayoría? ¿Cómo esperar  que un sujeto ame y respete la vida si sus días son un ensayo de la muerte?  ¿Cómo querer vivir en paz y libertad mientras una parte muere en la guerra diaria del sobrevivir y es esclavo de un presente de miserias inquebrantables? ¿Cómo encontrar la armonía en una sociedad donde a una gran parte no se le posibilita un papel en blanco para que dibuje el futuro?

La inseguridad
La inseguridad es sobre todo fruto de eso: de la incertidumbre sobre un futuro que no aparece al final de la mirada de casi la mitad de los argentinos, la mayor parte jóvenes. Lo inmediato devora los días que vendrán para muchos de ellos. Jóvenes que sólo serán jóvenes y nada más. Jóvenes que no pueden sentarse a imaginar sus hijos. Para muchos, lo próximo será una incógnita irresuelta de por vida. Porque su vida será de lunes permanente y el viernes sólo un capricho de ruleta rusa. Y cuando para estos muchos y en general jóvenes, sobrevivir es el estilo de vivir, cuando la indigencia congénita es su enfermedad indeleble, cuando  la desidia y la frustración de no poder soñar ni proyectar se les hace rutina, cuando  estos muchos no pueden sentir la pasión por lo que va a venir; la paz que tanto anhelamos sólo será una inédita expresión de deseo. No habrá equilibrio y calma mientras una gran parte se alimente del abandono y la humillación y beba de la indiferencia. Porque el problema no es sólo de los sin futuro. No podremos encontrar frasquitos de tranquilidad instantáneos para nuestra pequeña vida y la vida de los que queremos solamente. Aquí no habrá de seguro una libertad chiquita para cada uno. En esta situación, lo mínimo es enorme. Se diluirá la seguridad privada en el problema público de la Inseguridad. Serán inútiles los barrios cerrados o los apacibles pueblos en el conflicto abierto y abrazador que implica la Inseguridad. Será tragado el intento individual de “salvarnos” por una sociedad que tarde o temprano nos alcanzará. Porque detrás de la mala noticia de cada día, de aquel titular que nos informa sobre este ilícito aquí, de ese crimen allá,  aparece lo que somos, aparece lo que nos pasa, lo  profundo y  lo esencial, el carácter social del problema que llamamos Inseguridad.

¿Dónde están los ladrones?
La violencia y el crimen, lo brutal y lo inhumano, no proviene de unos pocos violentos, criminales, brutos e inhumanos, sino de una sociedad que practica la desigualdad, la corrupción, la indigencia como deporte nacional. ¿Y dónde están los ladrones me pregunto entonces? Porque los pibes chorros roban carteras y zapatillas, es cierto, pero mientras tanto la clase política dirigente que se junta y se separa, se amiga y desamiga para lavarse sus variables rostros según las circunstancias, echada a patadas en el 2001 y resucitada por listas camaleónicas y viejos proyectos nuevos, roba infancias, saquea porvenires juveniles y vende paco. Cada una de sus decisiones tomadas desde arriba, hoy cercenan directamente las posibilidades de mañana de los de abajo, y ese es el gran crimen nacional. Y esto es algo en lo que se parecen un oficialismo divagante y vendehúmos y una oposición político partidaria oportunista, carroñera, ávida de poder pero con los mismos proyectos a largo plazo: dependencia y entrega. Hablemos de la esencia del problema que propuse antes, hablemos de lo esencial y lo significativo que es hoy en nuestro país el pago de una deuda externa ilegitima y fraudulenta,  mil veces pagada y mil veces adeudada, manchada de sangre esparcida por dictadores y que multiplica sus intereses como bacterias. Esto es algo en lo que todos, oficialistas y no, están de acuerdo. Esto es justamente una de las causas que hipoteca cada segundo y cada esperanza de nuestro pueblo. Y mientras la presidente festeja paradójicamente esta libertad de la dependencia (porque cuanto más pagamos peor estamos), anunciando siempre superávits contables que no aparecen en la mesa de los argentinos, el país de las maravillas que nos promete no aparece. Sus conferencias siempre adornadas con el aplausómetro de sus adulones, explican lo bueno y generoso de negociar con los históricos imperialistas, piratas saqueadores de riquezas del tercer mundo: empresarios holandeses, rusos, ingleses, yanquis, franceses, españoles, belgas, chinos, italianos, todos se regocijan y se complacen con las políticas económicas de un país que los agasaja como recién llegados y que no pone freno a su voracidad. Así, envenenan nuestros ríos, toman metales de allí, dejan la tierra estéril por allá, pagan unos pocos salarios de miseria que en sus países no sirven ni para mantener los gastos de jardinería de los palacios de su realeza; y cuando los números no cierran, bajan la persiana, arman las valijas y se vuelven a casa. ¡¿Y qué es lo que queda de nuestra casa?! Fábricas vacías. Panzas vacías. Perspectivas vacías. Lo que se dice: los platos rotos que venimos barriendo por lo menos desde 1976 hasta acá.

Fabricantes de pobres
¿Y dónde están los ladrones me pregunto otra vez? Los que roban la dignidad de un pueblo trabajador cada vez que entregan la soberanía al imperialismo rapaz y usurero, los que avalan el saqueo de nuestros recursos y se enriquecen como intermediarios, los que no combaten y son cómplices del narcotráfico que flagela la mente y el alma de nuestros pibes. Dónde están esos nombres difíciles de encontrar, adeptos al gatillo fácil, los que aparecen siempre ligados a esos negocios turbios que nunca se descubren. Dónde están los que no roban carteras, zapatillas ni bicicletas porque roban países, vacían empresas estatales y subastan nuestra tierra; dónde están  los que usan fondos públicos para vacacionar, los que roban en las oficinas del  Estado, los que no imparten justicia y la profanan, los que en vez de cuidarnos nos matan. Dónde están los ladrones de presupuesto educativo, de salud pública, los deudores de deuda interna. ¿En dónde se esconden estos fabricantes de pobres? ¿Cuál es la guarida de estos amasadores de la violencia y la apatía?

Nuestra opción
Saber buscar. Desenmascarar. Cambiar de fondo es nuestra opción. Aprender que los pibes no nacen chorros. No debemos luchar por bajar la edad de imputabilidad, debemos luchar por subir sus expectativas de vida. No debemos pensar en la pena de muerte como una salida, siendo ésta un orgullo paradójico del gobierno estadounidense, que ni siquiera puede garantizar la paz en su territorio y atenta de  vez en cuando con la paz del mundo. Debemos comprender que un Estado que protege no es un Estado represivo, un Estado golpeador o autoritario. Ya tuvimos un Estado de ese tipo que asesinó a nuestros hermanos y liberó a los asesinos, que empeñó nuestra economía y ofertó  nuestra independencia. En general los Estados vigilantes que tuvimos fueron los que sembraron en aquellos años la semilla de la miseria y la violencia que hoy florecen. Debemos tener memoria. En nombre de la seguridad se implantaron los más profundos planes de asalto y estafa al pueblo argentino. Debemos recordar y repensar: la seguridad no deviene de las armas sino del trabajo y se nutre del pan para todos.  La seguridad deviene de la buena política y no de la corrupción. La seguridad no deviene de la proliferación del aparato policial, deviene primero de su purificación. La policía no debería de vigilar la sociedad, la sociedad debe controlar a la policía.
Saber buscar. Desenmascarar. Hagamos justicia implacable contra los ladrones de futuro. Cambiar de fondo es nuestra opción. Si se cierran las fábricas y no se abren escuelas, si la leche cuadriplica el precio de la droga, el futuro será flaco y la libertad la vieja historia.  La seguridad no es en definitiva seguridad sino igualdad. Y la igualdad  no será de a pedazos para unos y para otros de a gotas. La igualdad es una y es toda.

* Estudiante de Antropología Social

Haciendo foco


¿Ronquido o Síndrome de Apnea Obstructiva de Sueño?

Podríamos decir que la pregunta de título posee una referencia doméstica y otra clínica. De todos modos, el ronquido es de conocimiento público y en la mayoría de los casos, sufrido por quienes comparten el lecho de sueño con quienes lo producen.

Con una incidencia del 40% en los hombres y un 15% en las mujeres, las consultas clínicas por ronquido mayormente son motivadas por la pareja o cónyuge, quien después de un gran padecimiento al ruido causado por el mismo, decide consultar a un médico. Otros suelen resignarse a esta situación y otros quizás acuerden dormir en habitaciones separadas.
Actualmente, existe un prurito en realizar la consulta sobre este tipo de situación cotidiana que parece tan simple. Sin embargo, en el caso en que estos ronquidos estén asociados a una patología subyacente, podrían ocultar un problema a futuro, derivando a enfermedades más graves e irreversibles.
Hoy se puede decir que existen síntomas visibles, comportamientos cotidianos y referencias anatómicas que inducen a sospechar del padecimiento de un trastorno respiratorio vinculado al sueño (TRVS).
Simplemente pensando en las siguientes preguntas, es posible tener referencia de la necesidad de realizar una consulta médica a estos fines.
Verifique el siguiente cuadro:

¿Se ha quedado dormido en alguna de estas situaciones?
SI/NO
Sentado y leyendo

Viendo la T.V.

Sentado, inactivo en un espectáculo (teatro, etc.)

En coche, como copiloto de un viaje de una hora

Sentado a media tarde

Sentado y charlando con alguien

Sentado después de la comida (sin tomar alcohol)

En su coche, cuando se para durante algunos minutos debido al tráfico


En caso que haya respondido SÍ en la mayoría de los casos, sería muy oportuna una consulta a su médico para que lo asesore o derive a un especialista, para una evaluación en Trastornos respiratorios vinculados al sueño (TRVS).

Recuerde: “El sobrepeso es un factor muy importante para este desorden”.

Conociendo la patología
El Síndrome de Apnea-Hipoapnea Obstructiva del sueño (SAHOS) es caracterizado por interrupciones parciales o totales de la respiración a nivel de la Vía Aérea Superior (VAS) durante el sueño. Dentro de los Trastornos Respiratorios vinculados al sueño (TRVS), este síndrome se presenta con una prevalencia del 2% a 4% de la población adulta y ocurre en ambos sexos. La Apnea (detención de la respiración en más de 10 segundos) tiene varias repercusiones en el organismo, por ejemplo produce hipoxia (disminución en los niveles de oxígeno presente en el organismo) y varios micro despertares nocturnos (generalmente inconscientes) con la consecuente interrupción del descanso reparador, afectando al aparato psíquico, endócrino, cardiovascular y respiratorio. Existen diferentes grados de severidad del Síndrome de Apnea de Sueño y los mismos pueden ser detectados por estudios clínicos de rutina. También se debe conocer que las apneas pueden tener diferentes orígenes (central, obstructivo, mixto) y estos tienen distintas maneras de tratamiento.

Diagnóstico
El estudio gold-standard (por excelencia) vigente para la detección de los Trastornos Vinculados al Sueño es la Polisomnografía de Sueño (PSG), que se realiza en un laboratorio especializado donde se debe descansar en una habitación, con un sistema de registro que detecta las variables de interés mientras el paciente duerme.
Actualmente, y sumando a este tipo de herramienta, existen sistemas simplificados de diagnóstico (que el paciente se lleva a su domicilio) que permiten brindar información de elevado valor para el especialista médico en este tipo de análisis (poligrafías digitales, oximetrías nocturnas).

Tratamiento
El avance y estudio de esta patología por médicos y colaboradores referentes en el tema en distintos países, y según manifiesta el Consenso Argentino de Trastornos Respiratorios Vinculados al Sueño (2001),  existe un tratamiento no invasivo para esta patología. El mismo se realiza con un equipo que ofrece aire a presión positiva continua en las Vías Aéreas Superiores, ingresando por la nariz (a través de mascarillas nasales).
Este equipo (de muy bajo tamaño, liviano, silencioso) que se utiliza durante todas las noches,  le provee a las Vias Aéreas Superiores en sus conductos de ingreso (nariz, faringe, laringe) una corriente de aire que genera un “entablillado neumático” el cual impide la oclusión de la vía y permite que el ingreso y egreso del aire en la respiración pueda realizarse sin interrupciones mecánicas (colapso de la Vía Aérea Superior). Este tratamiento generará en el paciente un cambio sustancial inmediatamente al día posterior, dado que ha podido recuperar la posibilidad de restaurar su sueño, y con ello normalizar las condiciones metabólicas (ej: recuperación muscular, mejorar la atención diurna, etc.),  de tensión arterial y frecuencia cardíaca, entre otros beneficios.

Para que este tratamiento sea eficaz, es muy importante la elección de la mascarilla adecuada a la fisonomía del paciente, como así también evaluar la necesidad o no de contar con un aire con la humedad y temperatura adecuada.
 
Actualmente esta terapia no tiene un tiempo de uso limitado, pero es tan adaptable a la vida cotidiana como quizás hoy lo sean los sistemas de celular y computadoras portátiles.


Recuerde: “Siempre al despertar de una mala noche, le sigue un mal día”.

Referencias
Asociación Argentina de Medicina Respiratoria (www.aamr.org.ar)
Consenso Argentino de Trastornos Respiratorios Vinculados al Sueño: MEDICINA (Buenos Aires) 2001; 61: 351-363
Laboratorio de Roncopatía del Sur (www.labrosur.com.ar )

Bioingeniero Edgardo Díaz
Mat. ICIE 2-3126-6


2000 camiones en la bodega de un barco




El 22 de julio y con el auspicio de Magan Argentina, AGD, BASF y Syngenta división semillas, Centro Desarrollo Agrícola SA y Barbini Ostoich SRL organizaron una recorrida en el Barco Ciudad de Rosario I, con el objetivo de que sus clientes amigos de la casa central de Chabás y sucursales de Villa Mugueta, Santa Clara de la Buena Vista y Los Toldos (Buenos Aires), puedan observar el destino de los granos que ellos mismos producen; además de disfrutar de un día de navegación en el río Paraná.
El Barco zarpó desde el amarradero de la estación Fluvial de Rosario, costeando hasta el puerto ribereño Terminal 6, última estación visitada. El recorrido duró 6 horas y se pudo apreciar la magnitud de los puertos en pleno trabajo de carga, y el tránsito de las naves de ultramar en busca de los productos y subproductos de la producción primaria para trasladarlos a los diversos mercados mundiales. Un detalle de consideración es que los barcos más grandes pueden transportar  60.000 tn, equivalente a la carga de 2000 camiones.
El desarrollo tecnológico en el sector agrícola ha hecho posible incrementos de la producción a niveles que años atrás resultaba difícil de imaginar, hoy ya es una realidad los 90.000.000 de tn y se proyectan 150.000.000 tn en pocos años más.
Sobre el río Paraná se encuentra el mayor número de terminales de granos. Son 12 las terminales que forman parte de los puertos de San Martín y Rosario, en una franja ribereña que se extiende 45 km al norte desde la ciudad de Rosario, desde Timbúes, y 25 km al sur de la misma ciudad. Si anexamos Villa Constitución, por su cercanía, son 25 km más al sur. Estas 20 terminales portuarias despachan el 80% de las exportaciones de cereales, oleaginosos, harinas proteicas y aceites vegetales del país.
La producción argentina de granos representa el 3% de la producción mundial, siendo nuestro país el primer productor de aceite y harina proteica de soja, esto hace que las terminales de Rosario sean reconocidas internacionalmente por poseer las plantas de mayor capacidad de crushing (molienda) de soja del mundo. 
En este escenario, se pudo tomar dimensión de la importancia nacional e internacional de las terminales portuarias del Up River Paraná, desde San Martín hasta Villa Constitución.

Por Antonio M. Barbini
Ing. Agrónomo
Centro Desarrollo Agrícola S. A. 

Cronistas de a pie


Un Mundial en Barcelona
Por Ana Guerberof *
ana.guerberof@gmail.com
Es un evento peculiar. En general, la selección española no gusta y, por tanto, el Mundial se vive sin pasión. Algunos preferirían incluso que ganase el equipo contrario, caso similar a la animosidad existente entre equipos rivales dentro de un mismo país. De hecho, este equipo ya ganó la Eurocopa en el 2008 y mientras muchos celebrábamos el éxito vitoreando por el balcón, pocos festejos hubo en la capital catalana. Algún petardo solitario, algún que otro lánguido claxon pero ni banderas, ni camisetas, ni celebraciones callejeras… nada. Y es que gusta más el Barça que la selección española. Numerosos amigos y compañeros me comentaban durante el Mundial que a ellos no les importaba quién ganara, que para ellos acabada la Liga, acabado el fútbol. Sorprendente, para cualquier argentino, que la Liga pudiera contar con más adeptos que una Copa del Mundo, pero así estaban las cosas.
La historia de Cataluña abunda en enfrentamientos con el poder central y es difícil que sus habitantes se identifiquen con cualquier evento que lleve la bandera española como símbolo. Muchos de ellos sencillamente no se sienten españoles. Justamente el día anterior a la victoria se celebró una manifestación de protesta ya que el Tribunal Constitucional español había recortado severamente el Estatut de Catalunya, la norma institucional básica del gobierno autonómico aprobada por el Parlament de Catalunya. Creo que, y para simplificar un tema demasiado complejo, no existe, en general, un sentimiento español; y sin sentimiento no existe la identificación con la selección, y sin identificación no existe la hinchada, y sin hinchada no hay banderas, ni camisetas, ni celebraciones callejeras ni nada que se le parezca.
Cuando la selección ganó el Mundial se produjo cierta algarabía: más petardos, más cláxones, más banderas e incluso reuniones “multitudinarias” en la Plaza España, aunque ni de lejos la cantidad de personas que vimos en Madrid congregadas para celebrar el triunfo y, más tarde, para recibir a los flamantes campeones. Lo cierto es que después de ver el partido en un bar de la playa de la Barceloneta, una pareja de escoceses nos preguntaron que dónde les aconsejábamos acudir para celebrar tan magno triunfo y todos respondimos al unísono ante la mirada un tanto atónita de los visitantes: “¡A Madrid!”. Es cierto que este Mundial por su singularidad -era la primera vez que España ganaba uno-, hizo que muchos sentimientos salieran del armario y que personas se vieran legitimadas a salir con la bandera española y festejarlo (más que en la Eurocopa al menos), sin por ello sentirse culpables. Los medios de comunicación catalanes se apresuraron en resaltar que se trataba del triunfo del juego del Barça, ya que siete de los jugadores pertenecen a este equipo (Villa fichó por el Barça justo antes del Mundial y eso ya cuenta). Nadie lo dudaba, ni siquiera Del Bosque, pero no deja de ser verdad que varios de estos jugadores no son catalanes.
Aquellos amigos y compañeros que antes no se habían mostrado muy aficionados al Mundial, me comentaban ahora que en realidad el triunfo era del Barça. Curiosamente aquello parecía justificar cualquier sentimiento de alegría final.
Llevo mucho tiempo en Barcelona y estas reacciones no dejan de sorprenderme; pero pienso que un sentimiento no se puede forzar, ni discutir, ni negar. Nos sentimos de un lugar por haber nacido o vivido ahí, porque nuestras familias son de ahí o simplemente porque es el lugar por el que “sentimos” apego. Si mis amigos y compañeros no se identifican con la selección, perfecto, no podemos forzar ese sentimiento (como parece empeñarse cierto sector de este país). No sé, ahora me ha dado por pensar que, como España se ha proclamado campeona del mundo, ciertos triunfos españoles comenzarán a normalizarse en Barcelona. Quizás me equivoque. De momento, disfrutaremos del Barça y, sin lugar a dudas, del increíble juego de Lio (o Leo) Messi.

* Argentina residente en España.

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Llanto de un sábado a la tarde


¿Cómo vivió usted la tarde del sábado en que Argentina quedó fuera del Mundial? ¿Qué hizo con los planes que había pergeñado? ¿Cuáles fueron los sonidos de su casa y de su barrio? He aquí un relato que, seguramente, muchos podrían haber escrito de contar con la habilidad y el gusto por la narración, de nuestro cronista.

Por Enzo Deluca


No aguanto más, con alguien tengo que compartir mi dolor, dicen que es más llevadero. Estoy en la mesa de afuera, solo en esta tarde húmeda, tibia y triste, muy triste de este sábado 3 de julio. Por ahí quedaron en la parrilla 2 ó 3 chorizos sin comer; iba a ser una fiesta y se fue todo al demonio. Cuando el 2 a 0 apagué el televisor. Sin saber qué hacer, todo estaba mal. Como para no derrumbarme y casi automáticamente prendí el fuego sin saber bien para qué; en algo debía ocuparme. Mi mujer limpiando el baño, mi hija muda en su pieza mirando por el otro televisor. No podía apartar el pensamiento de lo que había visto… ¡Cómo puede ser!... Pero ahí estaba arriba a la izquierda de la pantalla el frío AL–2  ARG–0. Ya ahora estoy llorando, se los juro, y no puteo contra nadie. Sigo queriendo al Diego y a los pibes (sé que ahora los que estaban esperando que esto suceda, les caerán sin piedad). Me pasan imágenes del partido y veo a los alemanes como una máquina fría y eficaz de mover una pelota y meterla adentro del arco. Lo veo a Carlitos dejando la piel como pedía el “10”; al gringo Heinze echando espuma por la boca; a Di María echando el resto; al Masche peleando contra una escuadrilla que se le viene encima; y a Messi… ¡ay Lionel querido!, tratando de hacer una… una tan sólo te pido. Luego aparece mi mujer y mi hija, y les prohíbo hablar del tema. Hablamos de bueyes perdidos, pero recurrente e inconscientemente aparece otra vez el fantasma de los rubios; fríos, meticulosos, ordenados; desbordando, apareciendo libres, proliferando como yerba mala (la cancha parecía de esas en que se juega al polo).
Todo ha terminado. Por lo que a mí respecta el mundial se acabó. Hago cuentas y no me dan los números, en el 2014 voy a tener 70, y para colmo se juega en Brasil. Creo que perdí la última oportunidad de ver a la Argentina campeón. Los alemanes nos escupieron el asado. El pueblo está silencioso. Parece un viernes santo.
La tristeza siempre se emparenta con el silencio.


Todo Deportes


Festejos, Reconocimientos, Cine y Museo

80º Aniversario del C.A.H.


El pasado 5 de julio el Club Atlético Huracán cumplió 80 años. En marzo, una comisión formada por gente allegada al club, se puso en marcha para recaudar fondos y organizarle el cumpleaños. A partir de esas reuniones surgieron las distintas actividades que se llevaron a cabo en la semana del cumpleaños y durante todo el mes de julio inclusive. Cada disciplina festejó con algún evento. Pero también, toda la familia zapatuda festejo en conjunto.

Festejo y reconocimientos
El lunes 5 de julio hubo varias actividades. En primer lugar se recordó en el Cementerio de la localidad a todos los simpatizantes, hinchas y dirigentes que ya no están. Huracán recuerda todos los años para esta fecha a las personas que han formado parte de alguna u otra forma del club.
Luego, a las 17,30 hs aproximadamente, se descubrió una placa con el nombre del Quincho de la pileta del Club. Este homenaje fue para el Señor Paco Arancibia.
Alrededor de las 18 hs, en el estadio “Chiquito Domínguez”, se realizó una suelta de globos, rojos y blancos, en la que participaron todos los chicos que practican las diferentes disciplinas en el club, acompañados por los profesores de la institución, familiares y simpatizantes. Este grupo de gente marchó luego hacia el Salón de Fiestas del club por la calle Monserrat Servera. Allí, se celebró el cumpleaños con torta, gaseosas y café, a salón lleno.
Previo a esto, en el Gimnasio, se descubrió una placa que le impone el nombre de Dante Arzani a dicho lugar.

Cine y Museo
El martes 6 de julio fue el Día de Cine en la sede. En una pantalla gigante se proyectó un video que reúne partes de la historia del club. La proyección fue en dos horarios: 13 y 21 hs. Fue tal la concurrencia de personas que el miércoles 7 el video fue repetido a las 21 hs.
El miércoles 7 de julio se hizo la apertura del Museo “Recuerdos de Familia”, el cual consistió en una muestra de fotos, copas, libros y medallas entre otras cosas que también hacen a la historia personal de cada hincha y a la historia conjunta del club. Como no se cuenta con un lugar físico apropiado para almacenar y exponer todos los objetos, sólo se trato de una exposición temporaria, pero con proyectos a futuro. El Museo estuvo abierto además del miércoles, los días jueves 8, viernes 9 y domingo 11.

Cena Aniversario 
El sábado 10 de julio fue la Cena Aniversario. Con la capacidad del Salón de Fiestas totalmente colmada, la familia zapatuda festejó el cumpleaños. De este modo, este cierre de una semana de actividades alusivas, contó con videos, espectáculos musicales y mucha alegría.