Sol Di Frente


CARNAVAL TODA LA VIDA

Por Sol Di Frente

Poco sabemos del origen del carnaval, pero cuando lo nombramos pensamos en “fiesta”, inclusive en la canción del gran Joan Manuel…
Los antecedentes más remotos datan de las primeras grandes civilizaciones: las fiestas griegas, llamadas “bacanales”, en honor a Baco, dios del vino; y las fiestas latinas, llamadas “saturnalias”, en honor a Saturno, dios de la siembra y la cosecha.
El carnaval, como celebración pública, tiene lugar antes de la cuaresma cristiana. Si bien está absolutamente ligado a la cristiandad, esta fiesta reviste cuestiones propiamente paganas, y de alguna manera lleva a cabo la ruptura de las normas que rigen a la sociedad.   
Nuestro carnaval guarda cuestiones importadas de otros tiempos y otras regiones geográficas, pero también mantiene costumbres, bailes y cantos de nuestras ricas culturas precolombinas (por suerte algo no perdimos aún).
Incluso sin feriado en el calendario, el carnaval se festejó siempre. Cada lugar a su manera. ¿Quién no lució una máscara de tela, que cubría toda la cara y con sólo dos agujeritos para ver (mal)? ¿Quién no hizo guerra de globos en la calle contra los vecinos, amigos o enemigos barriales? ¿Quién salía de la casa en época de globazos, sin ser amenazado o atacado, aun sin querer participar de la guerra?
Ahora los carnavales refieren al brillo, al baile continuado, a cuerpos esculturales y al descontrol… Nada de bombuchas o mexicanos (que dolían más)… Nada de disfraces que ocultaban o nos otorgaban otra identidad, la del carnaval…
Ahora que volvemos a “festejar” el carnaval con feriado y todo, logremos coronar reyes carnavalescos, que “Hoy el noble y el villano, / el prohombre y el gusano / bailan y se dan la mano / sin importarles la facha”, que vuelvan las guerras de agua (sin atentar contra la ecología por su uso indebido).
Con este feriado renovado me invadió la nostalgia de aquellos veranos.
Ojalá que al grito de “CARNAVAL”, volvamos cada año al papel picado, las serpentinas y los tradicionales pomos de agua, apretándolos aunque sea desde el recuerdo…

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