Protesta agraria en Chabás


El martes 16 de febrero se realizó en Chabás la primera protesta del campo en el corriente año. Con la presencia de Eduardo Buzzi, presidente de Federación Agraria Argentina (FAA); representantes de Coninagro, gremios, chacareros de otras localidades y provincias; así como del Pte. Comunal Osvaldo Salomón, se hizo un tractorazo, luego conferencia de prensa y finalmente un acto en el predio del ferrocarril.

Alrededor de las 10.30 hs del martes 16 de febrero Chabás fue epicentro de la primera protesta del campo realizada en el 2010. Una treintena de tractores dieron una vuelta por el pueblo, acompañados por chatas y autos que engrosaban la carabana encabezada por el vehículo que trasladaba a Eduardo Buzzi y demás dirigentes, entre ellos los locales Ciriaco Fortuna (Director del Distrito IV), Juan Luis Di Tello (Pte. de FAA Filial Chabás) y Osvaldo Salomón, Presidente Comunal.
Esta vez el motivo central de la protesta fue la política oficial en materia triguera y ganadera, tanto por la falta de precio del trigo como por la faena indiscriminada de ganado vacuno, que llevó, según aseguraron los dirigentes gremiales, a la suba de los precios de la carne por aparecer actualmente la misma como un bien escaso.
La mayor adhesión de los presentes se produjo en el momento en que Buzzi dijo: “por cuestionar este modelo agropecuario, por volver a señalar la necesidad de un país federal en serio, y por plantear que no vamos a permitir una agricultura sin agricultores, es que hoy desde Chabás la FAA, Coninagro, Autoconvocados, la institucionalidad y los movimientos sociales, volvemos a decirles, no nos vamos a poner de rodillas como todavía, aunque no lo expresen, sigue estando en la voluntad de los que nos gobiernan”.
Los canales nacionales de televisión pasaron en directo lo sucedido en Chabás, incluso el acto posterior en el que los oradores se dirigieron a los presentes en el predio del ferrocarril, a la vera de la ruta 33.
En un país que desde sus inicios se ha insertado al mercado internacional gracias a la exportación de granos y carne, nadie puede estar en contra de que el sector agropecuario cuente con las políticas nacionales pertinentes, que redundan en beneficio de la sociedad toda, debido a la cantidad de industrias, comercios y servicios que derivan de la actividad rural.
Pero quizás, son tantos en la actualidad los problemas que sufre nuestra sociedad, relacionados con la inseguridad, la inflación, la falta de políticas y gestión también en otras áreas, que aquel que trabaja día a día por un sueldo que no crece en la medida de los aumentos que se han venido verificando desde los impuestos hasta los alimentos, y que no encuentra el modo ni el interlocutor frente a quien hacer su reclamo que siempre aparece como menor, frente a estas cuestiones resonantes, opta por quedarse en su casa, mascullando su propia bronca personal, convencido de que el único modo de aportar a su propio peculio y a la riqueza nacional, es su trabajo diario. Y aquí la redistribución vía hospitales, escuelas, y demás obras que no llegan, opera como factor aislante entre el sector agropecuario y el resto de la sociedad que apenas puede comprar carne y pan.

Por Alejandra Tenaglia

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