BOSNIA - HERZEGOVINA
Por Sebastián Muape
sebasmuape@hotmail.com
Este país
europeo con capital en Sarajevo, es el único debutante que tendrá la Copa
Mundial de Brasil 2014. Nunca pudo clasificar para un torneo internacional, sin
embargo aspira a avanzar a octavos detrás de Argentina, con quien se enfrentará
el 15 de junio en el Maracaná, en lo que será el primer partido para ambos
equipos en suelo brasileño.
Una ruptura sangrienta
El 14 de diciembre de 1995, en lo que se conoce como “Acuerdo
de Dayton”, se firmó el fin de la guerra de Bosnia. El conflicto se inició en
abril de 1992, momento en el que la Unión Europea reconoció la independencia de
este país, avalando la separación de la antigua Yugoslavia. Fronteras adentro,
bosnios y serbobosnios mantuvieron un enfrentamiento con tintes
político-religiosos que dejó casi 200 mil muertos y una devastación absoluta. A
19 años de aquella pesadilla, esta joven república federal con sus 4 millones
de habitantes, se repone de fracturas multiétnicas y al igual que Croacia,
Eslovenia, Macedonia, Montenegro y Serbia, escribe su destino como uno de los
seis Estados soberanos en que se desmembró el territorio yugoslavo.
En materia futbolera
En 1996, la FIFA aceptó como uno de sus miembros a la
Federación bosnia, esto le permitió disputar
eliminatorias europeas para las competencias entre selecciones. A partir de aquel
momento, lo más destacado fue perder dos repechajes consecutivos frente a Portugal,
primero por un lugar en Sudáfrica 2010 y después para la Euro 2012.
Las cosas iban a mejorar, para eso en 2009 se hizo cargo
del equipo de los Balcanes, Safet Susic. Reconocido en 2004 como el “Jugador de
Oro” por la Federación de su país, jugó para Yugoslavia en España 82 e Italia
90 y brilló en el París Saint Germain, camiseta que defendió durante nueve años.
A las órdenes de Susic, de 58 años, Bosnia disputó la
eliminatoria con Eslovaquia, Lituania, Letonia, Liechtenstein y Grecia, con quien
igualó el primer puesto, logrando clasificar por diferencia de gol. Ganó ocho
partidos, empató uno y perdió uno.
"Esperamos vencer a
Irán y empatando con Nigeria, clasificarnos segundos detrás de Argentina", declaró Susic, una
vez conocido el sorteo que en diciembre ubicó a su selección en el grupo F,
junto a los países mencionados. Como vemos, apuestan a pasar a octavos
secundando al equipo de Sabella.
Destacados
Con 72 partidos jugados y 23 goles, el jugador con más
presencia en el equipo nacional y uno de sus símbolos, es el mediocampista
Zvjezdan Misimović de 31 años, con presente en el Dínamo de Moscú y pasado en
el Galatasaray turco y Wolfsburgo alemán.
Sin embargo la gran figura del equipo es Edin Dzeko. Compañero
del Kun Agüero en Manchester City, este centrodelantero de 28 años y 1.93 de
estatura juega en Inglaterra desde 2010 e hizo más de sesenta goles que
sirvieron para ganar la FA Cup, el torneo más antiguo del mundo, y la Premier
League hace dos temporadas. Con su selección, en eliminatorias, marcó diez
goles en igual cantidad de partidos.
Bosnia evolucionó futbolísticamente en los últimos años,
capitalizando como experiencia las mencionadas eliminaciones frente a Portugal;
desde aquel momento su entrenador trabajó para lograr un equipo sólido en
defensa y con buen juego aéreo. Si bien tácticamente en muchos de sus partidos
presenta un solo delantero bien definido y un mediocampo superpoblado, muestra un
buen ataque con Dzeko e Ibisevic (del Stuttgart alemán), quienes aportan capacidad
goleadora como para sorprender a cualquiera. Tal vez la principal limitación
esté en el hecho de no contar con dos jugadores de nivel similar por puesto, lo
cual es ideal para para afrontar un Mundial.
Buscando roce frente a selecciones importantes para la
puesta a punto, Bosnia se enfrentó a Argentina en noviembre del año pasado en
Estados Unidos, donde perdió por 2 a 0 con doblete de Sergio Agüero, partido
del cual no fue parte Lionel Messi. Ya en 2014 y en lo que sería su último
amistoso previo a junio, también perdió por el mismo resultado frente a Egipto.
A poco más de dos meses para su compromiso deportivo más
importante, el pueblo balcánico celebra la histórica clasificación, no sólo por
lo que representa a nivel futbolero, sino también porque considera que el
deporte unirá lo que se ha roto en la guerra. Cabe recordar que este plantel
está integrado por musulmanes, serbios y croatas, las principales etnias que
conforman su población y que a pesar de haber tenido tajantes diferencias
ideológicas, coinciden en la ilusión de hacer un papel respetable en el
Mundial.
¿Y POR CASA CÓMO ANDAMOS?
El plantel argentino de veintitrés futbolistas que viajará
a Brasil, está casi definido. Los principales referentes del grupo -como Messi-,
resaltan permanentemente lo bien que está el grupo en lo emocional y la unidad
que en las convocatorias supieron conseguir. Si agregamos que Sabella dice
tener el 90 % de los nombres en mente, pues no quedan lugar para grandes
sorpresas.
Sabido es que el Técnico argentino valora a los jugadores
polifuncionales que aporten soluciones a diversas necesidades, ya sea para
defender con línea de tres, cuatro o cinco en el fondo. De acuerdo a este
criterio y teniendo en cuenta que Federico Fernández y Ezequiel Garay son los centrales
titulares y que la defensa se completa con los laterales Pablo Zabaleta y
Marcos Rojo, sólo se podría sumar un lateral natural como Gino Peruzzi. La polivalencia
de Campagnaro, que puede ocupar cualquiera de los cuatro lugares de la defensa,
y las presencias habituales de José Basanta y Nicolás Otamendi, cierran el cupo
de defensores.
El mediocampo también ofrece pocas variantes, Ricky
Álvarez y Eric Lamela pelean por un lugar con cierta ventaja sobre Augusto
Fernández y José Sosa, siendo éste una debilidad de Sabella. El resto es
conocido, Mascherano y Gago están firmes como doble cinco, Di María es
intocable, y están Ever Banega (Newell´s le da la continuidad necesaria) y Maxi
Rodríguez como relevos inmediatos. La delantera sale de memoria con Messi,
Higuaín y Sergio Agüero. Ezequiel Lavezzi tiene un lugar asegurado y el nivel
de Rodrigo Palacio en Inter de Italia parece darle una gran chance de estar en
el plantel. El puesto más controversial de la Selección Argentina sigue siendo
el del arquero, si bien Sergio Romero tuvo una aceptable actuación frente a
Rumania en marzo pasado, no consigue adueñarse del arco del Mónaco para tener
ritmo de competencia. A pesar de ello, Sabella está muy conforme con su nivel y
no deja lugar para discusiones. Hace pocos días declaró que Romero es un
arquero excelente y que el hecho de no jugar seguido no atenta contra su rendimiento,
con lo cual prácticamente le está dando las llaves del arco argentino.
Faltan poco más de sesenta días para el inicio del
campeonato del mundo, el equipo argentino tiene dos amistosos programados como
para despedirse del público en su tierra. El 4 de junio se enfrentará a
Trinidad y Tobago en el Monumental, y el 7 hará lo propio frente a Eslovenia en
el Estadio Único Ciudad de La Plata.
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