Tenencia responsable de mascotas

Por Mariel Avoledo / Médica Veterinaria Mat. 1330 

maravoledo@hotmail.com

La tenencia responsable de mascotas hace referencia al conjunto de obligaciones que una persona o familia adquiere al decidir adoptar o comprar una mascota, asegurando así  el bienestar del animal, de las personas y del ambiente.
Cuando uno hace referencia a una mascota, está hablando de un animal doméstico que convive con el hombre para fines de compañía y entretenimiento. Entre las mascotas, encontramos a nuestros queridos perros y gatos fundamentalmente.
N0 se deben adoptar especies de animales silvestres o exóticas como mascotas, ya que estos generalmente son obtenidos a través de gente inescrupulosa que los saca de su hábitat natural, y son llevados en condiciones de hacinamiento para ser vendidos; además, generalmente son animales que se encuentran en peligro de extinción. Un ejemplo muy común son nuestros queridos quelonios -tortugas- y las llamadas “cotorritas”, que son habitualmente traídas como obsequios desde el norte de nuestro país.
Estos animales sufren mucho el cautiverio, generalmente se inmunodeprimen, enferman y terminan muriendo.
Estas especies deben vivir libremente en su hábitat natural.
Volviendo a nuestras mascotas domésticas, al adquirirlas, también adquirimos ciertas obligaciones, como ser:
·         Brindarle una buena alimentación (evitar sobrepeso, evitar dar golosinas) y agua a disposición.
·         Brindarle un espacio adecuado teniendo en cuenta el número de animales que se tenga, raza y edad de los mismos (no es lo mismo el espacio que requieren tres animales pequeños que tres de razas gigantes).
·         Dar protección ante las inclemencias del tiempo, tener un resguardo tanto para las lluvias como para las temperaturas extremas.
·         Su lugar debe tener una limpieza y desinfección periódica (con lavandina y agua se solucionan muchos problemas).
·          Retirar diariamente sus excretas (ayuda mucho al control de las parasitosis cortando su ciclo biológico y reproducción).
·         No mantener animales atados, ya que esto generalmente trae aparejado problemas de fobias y agresiones.
·         Dar paseos periódicos para su distracción y su bienestar físico.
·         Recordar recolectar la materia fecal de la vía pública.
·         Desparasitar periódicamente según su médico veterinario lo aconseje (no deje de consultar, no administre antiparasitarios porque sí; muchas parasitosis se controlan a través de tratamientos específicos con distintas drogas y necesitan de análisis de materia fecal).
·         De forma obligatoria se debe vacunar anualmente contra la Rabia tanto perros como gatos; también hay otras vacunas específicas como la vacuna quíntuple o séxtuple, Leptospirosis, triple felina, y otras.
·         No permitir el vagabundeo, ni salidas nocturnas. La mascota debe ir siempre con collar, correa y bozal (tener en cuenta legislación comunal); y acompañada de un adulto responsable. Evitando así que se alimente de basura, peleas callejeras, mordeduras y accidentes.
·         Esterilizar (lo ideal) a su mascota o dar un método anticonceptivo adecuado (no recomendable por largo tiempo –consulte a su veterinario-) para evitar  reproducciones no deseadas.
·         Recuerde que el médico veterinario es el único que puede aconsejar correctamente sobre las medidas preventivas, curativas y la etología de su mascota.

Un dueño responsable evita que su mascota pueda transformarse en un riesgo para la salud de su familia, de sus vecinos, de otros animales y del medio ambiente.
¡No olvidemos que lo que más necesitan nuestras mascotas son cariño y respeto! ¡Ellos te lo retribuirán con muchos movimientos de cola, lamidos, aullidos y ronroneos!


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